9 mar 2012
Cuando se habla de velociraptors, probablemente a la mayoría se le vienen a la mente las escenas de Jurassic Park con esos temibles y asesinos reptiles depredadores que corrían a altas velocidades para cazar sus presas, pero ¿qué tal si les dijera que ese concepto podría ser una farsa, porque este dinosaurio no sería más que una simple bestia carroñera?
Un equipo de científicos, analizó el esqueleto de un velociraptor hallado en el desierto de Gobi, en Mongolia, y descubrió que en su estómago contenía un hueso de un pterosaurio. Raro.
Raro, porque -tal como los investigadores afirman- un velociraptor nunca se hubiera enfrentado a un pterosaurio, principalmente porque a diferencia de cómo fueron representados en la película de Steven Spielberg, estos dinosaurios medían alrededor de medio metro de altura, por lo que eran demasiado pequeños como para medirse frente a uno de estos alados. Además, como no se trata de una especie que también pudiera volar, difícilmente lo hubiera tenido cerca.
“Hubiera sido difícil e incluso peligroso para el pequeño dinosaurio terópodo apuntar hacia un pterosaurio con una envergadura de dos metros o más, a menos que éste ya se encontrara enfermo o herido. Entonces lo más probable es que el hueso de pterosaurio que identificamos en el intestino del velociraptor haya sido arrancado de un cadáver en vez de ser el resultado de una muerte depredadora”, explicó David Hone, uno de los científicos detrás de la investigación publicada en Palaeogeography, Palaeoclimatology, and Palaeoecology.
Cabe destacar que esto es una teoría, y teorías hay más que fósiles.
